Hoy a mediodía
Hala, me ha pasado como a Celtas Cortos aquel 20 de abril: "pues es que estaba aquí solo, me había puesto a recordar, me entró la melancolía y..." ¡me he tenido que masturbar! Sí, ya sé que ahí me he salido un poco de la canción pero bueno, es que igual los chicos de Celtas Cortos no se habían puesto a recordar lo mismo que yo... los seis polvos en la mañana de ayer... uff. ¡Qué mañana!... seis veces seis me follaron... que las conté. Dos L. y las otras cuatro... estoooo... no, jeje.
Pero lo de ayer no os lo voy a contar ahora, que es sábado y me toca irme a hacer la compra. Eso os lo cuento luego, o mañana, o cuando tenga tiempo de escribirlo.
Empiezo por el principio, o como dijo Garci, que sabe mucho de muchas cosas, begin the begin. El caso es que esta mañana la he pasado con un calentón!! No paraba de recordar cositas de lo de ayer y bueno, le he estado mandando fotitos a L. y claro, el calentón como que no se me pasaba. Y a él se le ponía una caritaaa... para comérselo, vamos.
Después de comer, toda la familia se ha retirado a sus aposentos, vamos que se han escaqueado para no recoger, y me han dejado solita. Y aquí es donde enlazo con Celtas Cortos porque al irme a mi habitación para cambiarme y bajar a comprar, me he puesto a recordar... y me he recostado un momentito en la cama, en ropa interior y... me ha entrado la melancolía, claro (bueno, qué pasa, cada uno llama a sus calentones como quiere, ¿no?)
Mi mano se ha deslizado bajo mi minúscula braguita y se ha encontrado mi coñito empapado de excitación. Con dos deditos he separado mis labios y con un tercero he empezado a acariciar mi clítoris, muy despacio, rozándolo apenas, casi sin tocarlo. Trazando círculos mis dedos han recorrido mi vagina, aumentando mi excitación. Mi mente, desplazada en el espacio y en el tiempo, traía estimulantes recuerdos de la jornada de ayer. Con la mano izquierda he recorrido mi cuerpo, acariciándome, mientras con el dedo central de mi mano derecha los movimientos circulares aumentaban el ritmo. El botoncito central de mi zona más sensible se ha endurecido, volviéndose extremadamente sensible, igual que mis pezones, masajeados por mí otra mano.
Con unos preliminares tan largos (desde ayer que llevaba yo así de excitada) no me ha costado casi nada... mi cuerpo ha respondido a mis masajes de forma casi instantánea y... me he corrido... mmmm, mi cuerpo se ha estremecido, sacudido, arqueado y... el orgasmo me ha dejado exhausta, y encantada, claro. Ahora voy a ver si me visto y me voy a hacer la compra sin pensar mucho... Intentaré no coger congelados, por si se me derriten de vuelta a casa.
Pero lo de ayer no os lo voy a contar ahora, que es sábado y me toca irme a hacer la compra. Eso os lo cuento luego, o mañana, o cuando tenga tiempo de escribirlo.
Empiezo por el principio, o como dijo Garci, que sabe mucho de muchas cosas, begin the begin. El caso es que esta mañana la he pasado con un calentón!! No paraba de recordar cositas de lo de ayer y bueno, le he estado mandando fotitos a L. y claro, el calentón como que no se me pasaba. Y a él se le ponía una caritaaa... para comérselo, vamos.
Después de comer, toda la familia se ha retirado a sus aposentos, vamos que se han escaqueado para no recoger, y me han dejado solita. Y aquí es donde enlazo con Celtas Cortos porque al irme a mi habitación para cambiarme y bajar a comprar, me he puesto a recordar... y me he recostado un momentito en la cama, en ropa interior y... me ha entrado la melancolía, claro (bueno, qué pasa, cada uno llama a sus calentones como quiere, ¿no?)
Mi mano se ha deslizado bajo mi minúscula braguita y se ha encontrado mi coñito empapado de excitación. Con dos deditos he separado mis labios y con un tercero he empezado a acariciar mi clítoris, muy despacio, rozándolo apenas, casi sin tocarlo. Trazando círculos mis dedos han recorrido mi vagina, aumentando mi excitación. Mi mente, desplazada en el espacio y en el tiempo, traía estimulantes recuerdos de la jornada de ayer. Con la mano izquierda he recorrido mi cuerpo, acariciándome, mientras con el dedo central de mi mano derecha los movimientos circulares aumentaban el ritmo. El botoncito central de mi zona más sensible se ha endurecido, volviéndose extremadamente sensible, igual que mis pezones, masajeados por mí otra mano.
Con unos preliminares tan largos (desde ayer que llevaba yo así de excitada) no me ha costado casi nada... mi cuerpo ha respondido a mis masajes de forma casi instantánea y... me he corrido... mmmm, mi cuerpo se ha estremecido, sacudido, arqueado y... el orgasmo me ha dejado exhausta, y encantada, claro. Ahora voy a ver si me visto y me voy a hacer la compra sin pensar mucho... Intentaré no coger congelados, por si se me derriten de vuelta a casa.
Me encantan tus historias y sobre todo como las relatas, tienes una manera de escribirlas que dan un morbo tremendo y leyendolas me entran una ganas de imaginar como te lo hacias y masturbarme al mismo tiempo. Mil gracias por tus relatos y aqui tienes un fiel seguidor.
ResponderEliminarQue no me entere yo que te quedas con las ganas, guapo ;-) Sé que eres uno de mis más fieles seguidores y me encanta pensar que les dedicas a mis relatos la atención y disfrute necesarios... mmmm... a ver cuándo volvemos a vernos y me lo cuentas. Besos indecentes.
ResponderEliminar